«Nací en Verona, cerca de las colinas y de las viñas de la DO Valpolicella: allí el vino se produce, se bebe y se respira». Con esta tarjeta de presentación, Leonardo Caneppele presenta su nuevo proyecto: Vino di Leo. Leonardo es un viejo conocido en el mundo de la restauración catalana. Enoteca d’Italia, su empresa de importación y distribución de vinos y destilados italianos de calidad, desembarcó en 2006 en Barcelona revolucionando el panorama eno-gastronómico de la ciudad, inmersa en aquel momento en el boom de los chef estrella. Gracias a él, en las cartas de vinos de los mejores restaurantes barceloneses encontraron su sitio el mítico Amarone de Bertani, el prosecco de Bortolomiol y la bodega siciliana Cento passi, que produce sus vinos en los terrenos confiscados a la mafia cerca de Palermo. Hoy, pasados 15 años, Leonardo cambia sus propuestas pero mantiene su filosofía slow: vinos de calidad, limpios (respetan el medio ambiente) y justos (respetan los derechos de los que trabajan para que puedan llegar a nuestras copas). En otras palabras, vinos elaborados en pequeñas bodegas con estándares de calidad muy elevados, la mayoría de ellos procedentes de agricultura eco-sostenible. La bodega que más admira Leonardo es Monte dall’Ora: «durante una visita a sus instalaciones, pude tocar con mano lo que significa la agricultura sostenible de verdad: terrenos de hierba, suelo perfumado y un pequeño bosque de cerezos asomando entre las hileras de viñas para mantener la biodiversidad». Leonardo destaca «la gran armonía que se percibe en sus vinos biodinámicos, artesanales y elegantes». De esta bodega, ¿qué vino nos aconsejas? «Sin duda, el Valpolicella Superiore Camporenzo». ¡A vuestra salud!
